La actriz de doblaje Victoria Céspedes Legarreta, de ascendencia boliviana e hija del paceño Hugo Céspedes y de Andrea Legarreta, ya formó parte en más de 50 producciones cinematográficas y televisivas, con sus 11 años de edad.
Victoria, en una entrevista con la Red Unitel, contó que cuando fue a “audicionar” para la prueba de doblaje no sabía que se trataba de la película del popular personaje de Nintendo y se enteró el día de la grabación: “Cuando grabé la película me dijeron que era para Súper Mario la película y me puse súper feliz”, relató.
El personaje doblado por Victoria es el de Lumalee, una estrella azul que realiza comentarios existencialistas y pesimistas, que fueron tomados con mucho humor por la audiencia y terminaron por convertir su aparición en memes que se hicieron virales en varias redes sociales.
Pero es su participación en Frozen II, donde tuvo un papel mucho más largo, lo que hace sentir más orgullosa a Victoria ya que dobló la voz de Anna, una de las protagonistas, cuando era niña.
“Todos los personajes que he interpretado me han dejado una enseñanza, pero creo que me quedo con el que hice en Frozen II, porque cuando tenía cuatro años lo veía siempre, entonces cuando me dijeron que sería Ana de mi película favorita me emocioné un montón”, cuenta Victoria.
Además de estas dos producciones, esta joven actriz ha participado de otros proyectos como Lightyear, Scrooge: Cuento de Navidad, Hawkeye y Moon Knight.
También ha prestado su voz a personajes como la versión infantil de la Princesa Leia de Star Wars para la serie de Obi-Wan Kenobi de Disney Plus.
Victoria comenzó su carrera casi sin querer: “Cuando tenía cuatro años me dijeron que haga una prueba de voz solo por diversión y me quedé, luego me empezaron a llamar y así me fui quedando en algunos proyectos importantes”, cuenta.
Además de su carrera en el doblaje, Victoria tiene planes de convertirse en actriz y tener papeles en los que pueda mostrar su rostro. A pesar de estar enfocada en su carrera en México, Victoria no oculta su entusiasmo ante la posibilidad de participar en una producción boliviana, ya conoció el país. “Cuando conocí Bolivia me gustó mucho La Paz”.
“La verdad lo hago más por hobbie que por el dinero, pero como mi familia es muy artística y así, además desde chiquita hablo muchísimo”, cuenta sobre el momento especial que vive.
Su padre, Tony Céspedes Domínguez, quien también es boliviano y lleva 17 años viviendo en México; su madre, Andrea Legarreta, apoya también a su hija en su carrera. Y el tercer pilar es su abuela, que es la con que practica todos los días. “Hago ejercicios de respiración, paso clases con mi abuela que es mi maestra”
Sobre los desafíos de ser actriz a su corta edad confiesa que las cintas del género de miedo son las más complicadas de doblar. “El mayor reto son las películas de terror porque me quitan imágenes que no son para mi edad entonces no puedo verlo”, cuenta.
Finalmente, Victoria deja un mensaje para los niños que quieren comenzar una carrera y puedan cumplir sus sueños: “Pueden lograrlo, sean muy constantes y practiquen mucho”.
Tomado: unitel.bo
